El carrillón Koshi es un pequeño instrumento musical similar a las campanas tubulares de viento. Está hecho artesanalmente con un tubo de bambú que alberga en su interior 8 láminas metálicas de sonido cristalino y rico en armónicos. Cada modelo conforma una escala distinta que está asociada a un elemento de la naturaleza: Tierra, Agua, Viento y Fuego. Los materiales son de gran calidad.
Se puede tocar sujetándolo del extremo superior y moviéndolo sutilmente para que una pequeña bola de cristal que lleva en el interior vaya golpeando las varillas y produciendo esa especie de improvisación aleatoria que crea la escala en la que está afinado.
También puedes colgarlo en algún soporte de manera que el viento pueda agitarlo en cada momento y hacerlo sonar.
Estuche semirígido adecuado para la mayor tipo de bouzoukis irlandeses.
Acolchado de 20 mm.
Bolsillo exterior de buen tamaño.
Soporte de mástil ajustable.
Protección anti-rayado de cuerdas.
Cómoda asa con protección.
Correas traseras acolchadas ajustables.
Dimensiones internas aproximadas:
Largo: 97 cm
Profundidad: 10,5 cm
Ancho: 36 cm
Hecho en China
El carrillón Koshi es un pequeño instrumento musical similar a las campanas tubulares de viento. Está hecho artesanalmente con un tubo de bambú que alberga en su interior 8 láminas metálicas de sonido cristalino y rico en armónicos. Cada modelo conforma una escala distinta que está asociada a un elemento de la naturaleza: Tierra, Agua, Viento y Fuego. Los materiales son de gran calidad.
Se puede tocar sujetándolo del extremo superior y moviéndolo sutilmente para que una pequeña bola de cristal que lleva en el interior vaya golpeando las varillas y produciendo esa especie de improvisación aleatoria que crea la escala en la que está afinado.
También puedes colgarlo en algún soporte de manera que el viento pueda agitarlo en cada momento y hacerlo sonar.
Cuando se deja de tocar, la palleta se expone a un cambio brusco de humedad si el clima es seco y los locales están ambientados con calefacción o deshumificados. Este secado acelerado provoca deformaciones en la palleta. Entonces, una vez que se deje de tocar, es el momento de hacer uso de este higrotapón. Se introduce por la campana del punteiro hasta que haga tope, sin miedo a dañar la garganta ni la palleta. Este, consta de un pequeño depósito de agua con una mecha inferior, que aporta la humedad que la palleta necesita para su conservación. Según sea la temperatura ambiente habrá que llenar el depósito con mayor o menor frecuencia; para hacer esta operación, introducir el higrotapón durante unos segundos en un recipiente con agua, sin llegar a la madera del mango. Fabricado por Sito Ca
