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Lista de productos por proveedor VICTOR BARRAL

Cuenco Tibetano - 501-600 gr Ø 13 cm aprox.

Precio 81,60 €
El origen de los cuencos tibetanos proviene de la religión chamánica Bon, que existía en el Tibet varios siglos antes de la llegada del budismo. Tradicionalmente se utilizaban para la meditación y sanación en los templos. Su construcción se basa en la aleación de metales como: oro, plata, mercurio, cobre, hierro, estaño y antimonio: "los siete metales planetarios". Incluye maza de madera.

Dan Moi Bao Go

Precio 12,31 €
Modelo de arpa de boca pequeña y liviana con gran sonoridad. Viene en una funda de madera y la lengüeta es de latón. Muy divertida y fácil de tocar Medidas: 10 cm aprox.

Juego de 8 campanas Do Mayor

Precio 76,90 €
Conjunto de 8 campanas (de Do5 a Do6) - escala diatónica Do Mayor. Estas campanas se pueden agitar o golpear por la parte de arriba. Los colores de estas campanas se utilizan para reconocer fácilmente el rango y una melodía.

Pandero chamánico V. Barral piel cabra - Afinable

Precio 160,00 €
Pandero afinable de 36x6 cm con 8 tensores accionables con llave allen, con cuerdas entrelazadas en el marco para poder cogerlo con comodidad. Parche natural de cabra de calibre medio-grueso que reproduce sonido grave y con pocos armónicos. Hecho a mano en España por Victor Barral. - Sirve funda ref. 1131 Los tensores permiten modificar la tensión del parche y, de este modo, conseguir un sonido más grave o más agudo, a gusto de cada uno. Por otro lado, con este sistema podemos compensar las variaciones del parche provocadas por los cambios climáticos.

Pandero cuadrado de Peñaparda con tensores

Precio 165,00 €
Pandero cuadrado de Peñaparda para tocar con baqueta (o porra). Dimensiones: 40 x 40 x 7 cm. 8 tensores integrados en el marco.  Parche de cabra. Dos cintas de tela opuestas fijadas al marco, para sujetar el pandero con el dedo pulgar. Maza o porra incluida.  Llave allen incluida. Fabricado en España por Victor Barral.  IMPORTANTE: al ser un instrumento totalmente artesanal, el artesano puede hacer ligeras modificaciones, que por lo general atenderán a mejoras, que pueden hacer que las fotos sean ligeramente diferentes a las actuales.  Lo peculiar del pandero de Peñaparda es la forma de tocarlo con una mano por un lado y una porra de madera por el otro, lo que permite una amplia posibilidad interpretativa en cuanto a ritmos y vistosidad se refiere.